jueves, 5 de junio de 2008

como en el zoo en ningun sitio



COMO EN EL ZOO EN NINGUN SITIO...

De todos es sabido que el zoo es la carcel para animales autorizada por todos los ciudadanos sin ningun tipo de remordimiento ni problemas de conciencia.

Ha llegado un punto en que vemos normal que en cada ciudad haya un zoo para regocijo de sus ciudadanos, sin ponernos en la piel de los animales que estan enjaulados y fuera de su habitat natural, y encima pagamos por verlos, que es lo mas deprimente que se puede hacer, pues ese dinero se invertira en capturar a mas animales y privarles de su libertad.

La excusa que ponen los organizadores de un zoo es que asi conservan a las especies, pues dicen que de otra manera acabarian por extinguirse y ellos hacen una labor de conservacion que no se cree nadie, pero que les funciona, ante la pasividad de todos nosotros.

Los tienen en cautividad y los hacen procrear para dar mayor fama a su zoo, como si de un espectaculo se tratara, y no hay mas que ir una vez a un parque zoologico para darse cuenta de en que condiciones tienen a los animales, con pocos metros para hacer su vida y llenos de tristeza, como sus ojos indican, y yo creo que es lamentable la cultura que tenemos los humanos en torno a los animales, pues no hay nada mas deprimente que pasear un dia por un zoo y ver a los probres animales solitarios y descuidados, muriendose de agonia y reclamando la libertad que nosotros le hemos quitado.
Los humanos somos con diferencia la peor especie animal que puebla la tierra, pues a parte de no reconocernos como animales que somos, encima recluimos a los demas y sacamos dinero de ello, sin importarnos un pimiento en que condiciones estan, y encima animamos a los crios a ir a verlos y les decimos que eso es lo mas natural del mundo, sin enseñarles realmente cual es la verdadera razon del porque los tenemos ahi, porque estamos acabando con ellos, con su habitat y la cadena trofica que tantos siglos ha funcionado, quiero decir, que sin una especie en concreto la otra no puede sobrevivir y asi sucesivamente, osea, que todos formamos parte de una estrategia colectiva que el la vida en general, y si nos cargamos a segun que especies nosotros corremos el mismo peligro de acabar extinguiendonos por la misma razon, porque todos somos imprescindibles para mantener el equilibrio vital, pero eso parece que no nos interesa aprender, y solo nos preocupamos en ocupar sus espacios para vivir nosotros y para poder explotar la tierra que por ley les pertenece a ellos.
Y es que somos una plaga maligna que estamos acabando con todo sin reponer ni mantener el equilibrio fundamental, para que todos podamos estar viviendo en el mismo lugar y en armonia.
Hacemos de los animales productos sin sentimientos a nuestra conveniencia, y los manipulamos a conciencia para sacar provecho de ellos, a unos metiendolos en granjas apretujados solo por la carne sin darle los minimos derechos para poder disfrutar de su corta vida, a otros utilizandolos en experimentos quimicos para que cuando te laves la cara con jabon no te escuezan los ojos, pues ya lo ha probado en miles de conejos de indias que han tenido que sufrir lo insufrible para que tu puedas comprarte esa marca de cosmeticos que se ha puesto de moda.
Que decir del negocio de las pieles, que se las arrancan en vivo por que asi quedan mucho mejor, para cuando tu te vayas a la discoteca puedas vacilar de chupa de cuero, en unos tiempos en los que no nos harian falta las pieles de los animales como antaño, pues hoy en dia hay mil formas de conseguir el preciado tejido, la ropa, sin necesidad de utilizar a los animales.
Y asi seguimos, jodiendolo todo y haciendo negocio de ellos, mintiendo acerca de sus condiones y justificando su encarcelacion en nombre de la supervivencia.

1 comentario:

loboestepario dijo...

El ser humano es el rey de los seres vivos en este planeta y muchas veces hace un mal uso de ello y si alguna especie nos puede dar buenos dividendos no dudamos en explotarlo al máximo para poder vivir cojonudamente.Lamentable.
Hay una frase que dice:Engarza en oro las alas de las aves y jamás volverán a volar.