viernes, 15 de enero de 2010

VOLVER A SER

Encendió la televisión y no vio nada.
Puso la radio y se cansó de dar vueltas por el dial.
El periódico de la mañana no le dijo absolutamente nada.
Los amigos ya no estaban donde
siempre.
El camarero le puso su café y la clientela era indiferente.
La familia estaba lejos y el teléfono era muy frío.
La pareja se le fue por donde vino.
Caminar le gustaba, pero no por las mismas calles de siempre.
La ciudad era otra, se la habían cambiado.

El trafico, los coches, la contaminacion, el ruido, las luces, formaban un todo indestructible.
En el piso de al lado se oían risas, aun alguien conseguía ser feliz.
De pronto le dio por escribir, por dar un repaso a su vida.
Blanco, todo lo que se le ocurría, hasta donde era capaz de acordarse tenia ese color.
Rompió la punta del lápiz en un garabato.
Pensó en el ordenador, claro, como no había caído antes....

Busco al azar información, mas no sabia que quería.
Entró en vídeos caseros, cortos de humor, catástrofes graciosas.

Los labios no se curvaban, ni hacia arriba ni hacia abajo.
Intentó leer historias, ponerse en la piel de los demás.
Ni frío ni calor.

Desconectó Internet y rebuscó viejas fotos en un cajón.
Ahora si, lo estaba consiguiendo.
Una lágrima luchaba por salir, por bajar hasta la comisura, mostrar su sabor.
Aun reticente, se aferró a la nostalgia.
Poco a poco empezó a sentir.
El alrededor perdía fuerza, y el interior se alzaba a pasos acelera
dos.
Con esfuerzo miró hacia la calle, aun podía esperar un poco mas.
Se sirvió una copa, encendió un cigarrillo.
Se recostó en el sofá, con las fotos tiradas a los lados.
Cerró los ojos.

Había llegado el momento.
Notó como se tranquilizaba el organismo, como se desplomaba la realidad.
Se dejó caer a un lado, en posición fetal.
Y lloró, no como un niño, que lloran con fuerza, sino como un hombre, que lloran pausados.
Abrigó la paz y el sosiego, y dentro de él, se abrieron puertas, tanto tiempo cerradas.
Sabia de antemano que donde mejor estaba era en si mismo.
Aunque cada día al despertar se esforzara por ser mas sociable.
Las cicatrices se curan solas.
Nada del exterior tiene yodo suficiente para curarlas.

Cuanta ternura, cuanta hermosura subían y bajaban por su cuerpo.
Los recuerdos.

Los errores.
Sabia que no era sal lo que le estaba echando a la herida.

Comprendia perfectamente que las cosas se superan afrontándolas.
Miel, azúcar, chocolate.
Eso es lo que se estaba dando.
Un atracón, un festín de dulzor.
Lo había tenido todo, o eso creía.
Ahora le quedaba lo mas difícil, quedarse consigo mismo.
Blandito, como una nube de golosina, así se había quedado.
Lentamente se abrió paso entre las sabanas.
Los sueños vendrían a buscarle.

6 comentarios:

mangeles dijo...

Efectivamente mi querido amigo Jocavi. Las heridas cicatrizan desde dentro. Es precioso como has descrito el dolor, el dejarse llevar por el dolor, para luego surgir de nuevo a los sentimientos y la vida. Me encanta este post.Me encanta como escribes.

Un beso grande, tan grande como tú escrito.

loboestepario dijo...

Excelente historia muy bien narrada,tranquila y relajada.Creo que todos necesitamos una motivación para seguir adelante y esa motivación puede estar en unas simples fotos,en un buen libro,en una conversación etc.Lo importante es estar atento cuando llega y aprovechar las oportunidades que la vida nos ofrece.

Sigue escribiendo viejo amigo.

Anónimo dijo...

Qué precioso texto J. abrirse para encontrase y curarse, lo has descrito de una forma que a medida que iba leyendo me iba emocionando y pensando... -es brutal como escribe este hombre-. Bravo y aplauso, no pares.
Abrazo grande

TORO SALVAJE dijo...

Que entrañable me ha resultado.
Que descanse.

Saludos.

clariana dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
clariana dijo...

Gràcies per les teves valuoses i amables paraules que has escrit en el meu blog. Estic ensimismada dins d'un sentiment profund i sembla que tot em rellisqui.
Sé que estàs a Barcelona com jo, (bé, jo a Sta, Coloma, però estimo molt Barcelona, hi he viscut molts anys.) agraeixo el teu oferiment, però penso que deus estar molt emfainat entre unes coses i altres i no et vull destorbar. Si ens comuniquem pels blogs, ja és molt per a mi. Gràcies i un petó.