MI ESTRELLA

Me gusta mirar las estrellas.
Me fijo en una y pienso que es mi madre.
Me tranquiliza saber, que allá en lo alto nos observa y nos protege.
Me reconforta saber que aprueba todas nuestras acciones, que asiente y sonríe cuando las cosas marchan bien, y nos abraza con su manto de luz y calor cuando algo se tuerce.

Me gusta creer que está viendo a sus nietos crecer, y aun me parece escuchar desde allá arriba aquellas palabras tan certeras:
"Ahora entenderás todo lo que tus padres hicimos por vosotros"
Y que razón tenias mamá.
Cuanto cuesta levantar una familia, y cuantos sacrificios hay que ofrecer.
Si, ahora entiendo aun mas si cabe, todo el amor que nos diste, toda tu dedicación hacia nosotros.

Ya sabes que te estamos enormemente agradecidos, forjaste en nosotros la semilla del cariño, de darlo todo por los tuyos, los nuestros.
A veces creíamos que el precio que pagabas era tu propia vida, pensábamos que tu dedicacion exclusiva a nosotros te arrebataba tu propia vida, que no vivías, por estar tan pendiente de nosotros.
Ahora entiendo que nosotros eramos tu vida, y no querías otra, que en tu casa tenias las felicidad que necesitabas y que de afuera no necesitabas nada, como te entiendo ahora, madre.

Tenerte allá en lo alto, resplandeciendo en el firmamento es menos doloroso al tener a nuestra criatura, por ella vivimos y por ella somos felices.
! cuanto te hubiera gustado verla, conocerla, abrazarla !
! que alegría y que felicidad hubieras sentido, tu primera nieta !
! hubiera sido el tercer nieto, después de los dos de mi hermana, tu hija !

Una nena, yo se que te hubiera encantado, ya me lo dice papá, lo que hubieras disfrutado con ella, con la ilusión que te hacia tener una......
Recuerdo cuando te lo dije que estábamos buscando a un niño/a, que alegría te llevaste.
Aun estando en el hospital,¿ cuanto llevabas ya allí ? dos, tres semanas????
que alegría te llevaste, y eso que aun no estábamos embarazados.

Y cuando nos quedamos, pobrecita mía, solo pudiste formar media sonrisa de lo malita que ya estabas.
Que pena, madre mía, que pena !
Durante meses han luchado dolor y satisfacción dentro de mi.
Gracias a ti, a nuestra familia, he elegido la satisfacción, aun cuando me es imposible pasar un día sin pensar en ti.

La nena me da tanto, es tan bonita, que aunque me duela la perdida mamá, sé que no te has marchado del todo, solo con mirar hacia arriba te encuentro, allá en lo alto, brillando, y se que sonriendo.