lunes, 23 de mayo de 2011

LAS DOS CARAS DE LA CREACIÓN

Cuando todo empezó, después del estallido, de la explosión, se creo el mundo que conocemos.
Con el, en el universo nuevo, resplandeciente de oscuridad, apareció la luz del sol, aquella estrella que por su proximidad a la tierra, ofrecía desinter
esadamente sus rayos solares al nuevo mundo en evolucion.
Todo cobro claridad durante el medio ciclo rotativo que la tierra daba alreded
or del sol.

El otro medio ciclo, las tinieblas se apoderaban de nuevo de la gran masa de piedra y agua que componian la tierra.
Durante el tiempo que duraron las reacciones quimicas, imprescindibles para crear la vida que hoy dia conocemos como tal, algo habitaba, volátil y sutil, las inmediaciones de la atmósfera nueva que se estaba formando.
Eran los espíritus, pero no de las personas, como hoy dia creemos qu
e son, esas nebulinas invisibles, esos entes que lo ven todo y en todas partes están, esas formas heterogeneas a las que llamamos almas.


Los espíritus que habitaban los primeros dias de la tierra, no eran de personas, ni mucho menos, estas aun no habían sido creadas por la evolucion de la vida, eran algo mas, eran los espíritus de las emociones, de los sentimientos , del bien y del mar en estado puro.
Tras mucho tiempo batallando entre ellos para hacerse con el control de
las nuevas formas de vida que estaban apareciendo en la tierra, solo dos llegaron a disputarse el control final de todas las cosas vivas de la gran piedra, del nuevo mundo, que gracias a unos factores de proximidad e intercambio de reacciones fisicas y quimicas, dan lugar a lo que hoy llamamos vida.

Estos dos espíritus, como no podía ser de otra manera,eran uno bueno y otro malo.
Como es bien sabido en todos los cuentos que se aprecien, el espíritu bueno conquisto el medio ciclo de luz de la tierra, y el malo el otro medio ciclo, el de la oscuridad.
El espiritu bueno, como tenia luz para trabajar, empezó a dar forma a la nueva vida emergente.
Todas las cosas en las que se fijaba y manipulaba y así dar consciencia a esa
vida que estaba naciendo, eran bonitas y agradables, de buenos sentimientos y de buenos propósitos, pues ya que tenia que entrar en la nueva vida, que menos que hacerlas buenas y con un propósito evidente, que fueran respetuosas con el medio con el que les había tocado vivir.


El espíritu malo, como apenas veía nada y solo disponía de la luz de las estrellas y de la luna para crear, todo lo que hacia por la nueva vida era deforme, feo y de pocos colores, no mas allá que el negro y el gris de las sombras.
Enfadado por esta situación, pronto empezó a estar disgustado y toda la vida
que tocaba para modificarla, le atribuyo condiciones negativas, autodestructivas, con el único fin de acabar de una vez por todas con el medio, como venganza por tener que trabajar en esas pésimas condiciones.
El resultado pronto quedo desvelado.

Por la tierra empezaban a poblarla seres de una hermosura inigualable y seres monstruosos que causaban daño allá por donde pisaban, por donde se establecían para vivir.
Fue inevitable la confrontación de ambos trabajos.
Las guerras entre seres vivos se sucedían en esas horas de la madrugada y el
atardecer, por donde coincidían unas pocas horas, antes de que cada grupo tomara disposicion de su parte del mundo.
Aquello era insostenible, y la evolucion biológica se vio claramente perjudicada, pues aquello no avanzaba de la forma adecuada.

Cansados de pelear, un dia se llamaron para hablar y buscar una solución al problema, que sin querer, se había producido.


Los dos espiritus se dispusieron a encontrar la mejor forma de llevar a cabo su trabajo, que no era otro que dar forma a la nueva vida que allí se estaba producien
do.
El espiritu bueno hablo de trabajar en equipo, y el malo de destruirlo todo y acabar de una vez con esa tontería que era la evolucion, pues el no podía evolucionar si no tenia luz para crear y dar forma a la vida durante sus horas nocturnas.
Aun asi llegaron a un acuerdo, y el espiritu malo accedió al trato.

El trato era que por cada forma de vida que tuvieran que crear, uno haría una parte y el otro la otra, asi que uno empezaría a dar forma a una vida y el otro la acabaria,intentando que las dos mitades se parecieran todo lo posible la una a la otra.
Asi pues, cuando uno creaba, el otro lo imitaba casi identicamente.
Empezaron por los primeros seres diminutos que habitan las aguas, y a partir de un eje central , uno de los espiritus, indistintamente, osea, primero uno y luego el otro, formaba una parte de la vida y el otro intentaba imitarla, quedando acabada cuando las dos mitades se unían.

Es por eso que todas las cosas vivas que hoy conocemos tienen dos partes, la buena y la mala, y a partir de un eje central, conforman un todo.
Obsérvese una hoja, un pez, una cara de animal,toda
s las cosas tienen dos caras, dos partes casi idénticas que forman la vida.
Esto a efectos visuales puede parecer curioso, y de hecho es asi en toda la vida que vive en la tierra, pero hay algo que no se ve, que no quedo del todo claro en el acuerdo que hicieron los dos espiritus, y es que aparte de las formas fisicas, tambien pusieron sus atributos a las nuevas vidas, osea el bueno puso toda la bondad y buen hacer en esa vida y el malo sus artes autodestructivas.


Ya no habían peleas entre los habitantes diurnos y nocturnos del mundo, pero los seres quedaron gravemente afectados por una polarizacion que cada forma de vida en su interior luchaba por abrirse paso, y es por eso que todas las formas vivas, incluidos nosotros las personas, llevamos una parte buena y otra mala en nuestra forma de actuar en la tierra.
Depende de cada uno y su lucha interior, para que se manifieste en un ser su lado mas oscuro o mas bondadoso.

Y aquí se acaba este cuento, con una inminente reunión entre los espíritus, un dia cualquiera aun no se ha decidido cuando sera, pero que seguro establecerán nuevas normas de conducta, pues se han dado cuenta que el trato que hicieron no funciona, viendo como estamos acabando con el mundo que nos ha tocado vivir.

martes, 10 de mayo de 2011

LA TIERRA QUE PISAS

La tierra que pisas, la misma en la que ahora trabajas, edificas o juegas, insensible e impasible, insconciente diría yo, esa misma tierra, tiene su historia, sus recuerdos.
La tierra no es solo arena y piedras que puedas remover a tu antojo, de cualquier manera, la tierra es mucho mas que eso.
La tierra en si misma habla de otros tiempos, de otras gentes, solo hay que prestar atención y escuchar con el alma, mas que con el oído, lo que tiene que decir.
Un poco de información tampoco iría mal para entenderla, para comprender donde ahora mismo te encuentras.
Si no puedes o no quieres saber de su pasado, no pasa nada, solo presta atención a las señales que en ella encuentres, y echa a volar tu imaginacion.
¿ Puede haber algo mas bonito e interesante, que saber lo que aquí aconteció ?
¿ Imaginar lo que en esta tierra paso ?


Aquí mismo, bajo tus pies, por donde pasas inadvertido, si, aquí mismo, en esta misma tierra que te soporta, ha vivido otra gente, lejanos parecen esos días, pero la tierra no olvida.
En esta tierra quedan las cicatrices de días pasados, de historias hermosas, de conflictos y reyertas tal vez.
Muy hondo, bajo tierra, aun puedes escuchar y sentir la presión de aquellas pisadas, del peso de aquellas primitivas casas, antiguos hogares, o simplemente notar los surcos de antiguos caminos, por donde la gente y los animales deambulaban de un sitio a otro, con mil propósitos, sin duda.
! Que poca importancia se le da a la tierra !
! Que rápido se acotan los terrenos y se ordena edificar, profanar esta tierra bendita en nombre del progreso y de la civilizacion !
Civilizacion que olvida a sus ancestros, y no rinde culto a un pasado quizás mas prometedor, de donde quizás, podríamos aprender mucho mas de lo que creemos.

martes, 3 de mayo de 2011


SI ESTO SIGUE ASÍ

Siguen especulando
con el ladrillo
yo que solo quiero
tener un piso
Y si un día soñaste
con tener hijos
Tendremos que (aparcarlos)
en cualquier sitio
*
Currando los dos
mas de ocho horas
El banco no cree
en nuestras historias
Avala que te avala
es la consigna
No llega ni para ropa
ni la comida
*
Te obligan a vivir
en la miseria
Todo destinado
a la vivienda
Hablan de la crisis
los mentirosos
Mientras haya paro
habrá tramposos

* Si esto sigue así
Yo ya no se donde vivir
Bajo un puente
Y que me arrastre la corriente

viernes, 29 de abril de 2011


ENTRAMPADOS SIN HOGAR

Rebuscando en la basura
cualquier cosa
Con un carro de la compra
como casa

Lo que coge va a venderlo
a bajo precio
Nunca tuvo que robar
para ganarse su sustento

Un escarabajo humano
Como un nómada urbano
Un desecho de esta sociedad mundana

Un recolector de escombros
Un reflejo de uno mismo
Cuando tienes que luchar por tu destino

Es un ser
No es un gusano
Hay quien roba
Y quien pone la mano

Y el que toda su vida
ha sido honrado
Le desprecian y le insultan
como a un guarro

El nos limpia y nos recicla
nuestra codicia
Y nos ensena una lección
que no olvidaras en tu vida

No por mucho renovarse
Vas a ser mejor que nadie
Volverás a irte a la cama, Miserable!

Conclusión de este mensaje
Cuando veas a un indigente
No lo juzgues por su aspecto al instante

Reflexion
Si abres la boca
Empatia
A todas horas

martes, 11 de enero de 2011

LA ARAÑA

La araña vivía placidamente en su rincón.
Allí, con la destreza que dan los genes, tejió una bonita telaraña.
Estaba muy contenta con su trabajo, digno de las de su especie, resistente y segura, sensitiva y muy pegajosa, como tenia que ser.
Se aposentó en medio de ella y se dispuso a esperar a su presa.
Cualquier insecto serviría, que no fuera demasiado grande, claro.

La anterior telaraña se la habían destrozado unos saltamontes, menos mal que ya tenia capturado a un mosquito, y pudo saciar su hambre mientras construía la nueva.
Pasaron los días y por allí no caía ninguna presa.
Empezaba a tener hambre, pero no estaba dispuesta a abandonar su " casa ".
Sabia perfectamente que e
mpezar de cero en otro lugar era peligroso, y mas aun deambular sin rumbo fijo, seria el objetivo de otros depredadores, así que decidió esperar.

Un día, cuando ya estaba nerviosa por el poco trafico de insectos, escucho el murmullo del revolotear de unas alas.
Mas bien un par de alas, osea, debían ser dos insectos.
Se quedó muy quieta y agudizó sus sentidos, sobre todo el de la vista, y si, ahí estaban, dos moscas perfectas para saciar su apetito.
Incautas e inocentes revoloteaban alrededor de la telaraña, y una de ellas quedó enganchada.
Por experiencia, sabia que no d
ebía efectuar ningún movimiento, hasta que la pobre infeliz desfalleciera queriendo librarse, pues lo único que conseguía era quedar mas atrapada aun.
Justo en el momento que notara que la mosca no se moviera, debía envolverla en un capullo e ir comiéndosela poco a poco.
Así había sido siempre y así debía de ser por los tiempos de los tiempos.

La mosca capturada no paraba de moverse y agitarse y lo mas curioso era que la otra mosca, la que había venido con ella, no paraba de dar vueltas alrededor suyo.
Parecía como si se comunicaran entre ellas, y la araña no sabia que hacer.
Sabia que una moriría por inanición, y que la otra tendría que seguir su camino, ley de vida.
La preocupación de la araña vino cuando la mosca libre se acercó a ellas y observó muy de cerca la escena, y después de un rato analizando la situación, voló hacia otra parte, como si se hubieran despedido.

La mosca atrapada dejó de
moverse, hacia rato que le flaqueaban las fuerzas, así que la araña aprovechó el momento y empezó a envolverla, sin prisa pero sin pausa.
No sabia si empezar a comérsela ahora una parte, o esperar a que se muriera del todo.
Decidió esperar, sus genes le decían que podía ser peligroso empezar antes de tiempo, podría salir malherida y la casa destrozada.
De pronto sintió un golpe, y todo empezó a tambalearse.
Luego otro, y cuando decidió mirar lo que pasaba, se dio cuenta que un trozo de tela había quedado destrozada.
Sin saber muy bien como actuar, decidió arreglar el roto.

Pero otro golpe, esta vez muy cerca suyo, la hizo pararse en seco y mirar hacia arriba.
No podía creerselo, era la otra mosca que cargaba con piedras y palos entre las patas y los dejaba caer justo encima de su casa.
La rabia se apoderó de la araña, y enseñando los dientes gritó con todas sus fuerzas.
Pero la mosca atacaba y atacaba, y no había tiempo que perder.
Tenia que rehacer la telaraña y guardar segur
a la presa que ya tenia.
El esfuerzo extra de la araña pasaba factura, tenia que comer algo para recuperar fuerzas.
Pero no podía, pues la mosca constantemente hacia blanco y destrozaba alguna esquina de la casa.

Pensó en irse y dejar atrás la presa, buscar refugio y protegerse de los ataques, pero algo dentro de ella había empezado a hervir.
Una rabia que no conocía la hacia mas fuerte y persistía en arreglar la tela costara lo que costara.
Una simple mosca no iba a humillarla de esa manera.
Pero se equivocaba, dos blancos perfectos en las esquinas hizo caer la tela encima de ella y la presa, y mientras se afanaba en volver a construir la arquitectura de la casa, vio de frente a la mosca parada ante ella.
Con cara desafiante parecía querer decirle " suelta a mi amiga y te dejaré tranquila ".
Pero el odio que estaba acumulando la araña hacia ella, cegaba su comprensión.
Solo pensaba en comerse a la mosca y cazar a la otra, sin darse cuenta que las fuerzas le empezaban a fallar.


Estaba tan nerviosa, hambrienta y llena de odio, que no podía hilar los hilos de la tela bien, incluso había momentos que ni siquiera le salia el flujo de hilo de su interior.
Esto hacia que se cabreará mas la araña, y encendida de cólera volvió a enseñar los dientes.
Aprovechando el despiste, la mosca contraatacó, esta vez tiraba de lo alto con sus patas hierba verde, lo que hacia que la pegajosa tela se volviera mas vulnerable.
La hierba caía entre los huecos abiertos anteriormente, y mucho trozos empezaban a cubrir el capullo.

La estrategia de la mosca no pasó desapercibida para la araña, y mas enfurecida que nunca decidió salir del rincón para intentar llevarse el capullo fuera de la vista de su compañera.
Inútilmente trato de mover la presa pero sin éxito.
No tenia fuerzas casi para nada, y tropezando entre sus propias patas cayó al suelo de espaldas, justo para ver allá en lo alto a la mosca con una piedra entre sus patas.
La piedra cayó encima de la araña, que se revolcó de dolor, y cuando se enderezó para volver a enseñar los dientes, se dio cuenta que el capullo ya no estaba, metros mas hacia delante suyo, estaba la mosca desenvolviéndolo.

Derrotada la araña, echaba fuego por los ojos y la sangre empezaba a hervirle como nunca antes.
Algo dentro de ella estaba cambiando, ya le daba igual la presa y su casa, ahora solo quería vengarse de la otra mosca, quería morderla y comérsela viva, si fuera posible.
La mosca victoriosa, no satisfecha aun, se plantó delante de la araña y empezó ha hacerle gestos con las patas, realmente parecía que se burlara de ella.
La araña quería avanzar hacia ella pero se le doblaban las piernas, y el odio, ese odio profundo producto de la desesperacion y humillacion, le quemaba las entrañas.

En el suelo, exhausta, miraba la escena la araña.
La mosca presa, no tardó en recuperarse gracias a su amiga, y pronto desaparecieron de su vista.
La araña no se lo podía creer, tras un rato sufriendo como ninguna otra araña hubiera sufrido nunca, consiguió levantarse y hacercarse a su rincón.
Derrotada, no se vio con ánimos de volver a construir otra tela, solo cabía esperar su muerte.
Pero no podía quitarse de la cabeza a la mosca triunfadora.
Como la odiaba, solo pensar en ella, se le salían los dientes en postura desafiante.
Sabia que iba a morir, era cuestión de tiempo.
No tenia fuerzas para nada mas, y solo sentía rabia en su interior.

De pronto un insecto apareció ante ella.
Indefensa, fuera de su tela y cansada, solo podía observarlo.
Era un mosquito que distraidamente pasaba por allí.
La araña, paciente como todas las de su especie, se armó de valor, y cobrando nuevas fuerzas fruto de la esperanza, espero a que se acercará.
Ya no veía a un mosquito, veía la cara de la mosca.

Y cuando este se acercó un poco mas, la araña se le tiró encima, y abriendo la boca le mordió con sus dientes sujentadolo para inmovilizarlo, y sin saber lo que hacia se dobló sobre si misma y de lo mas profundo de su ser apareció un aguijón , que de un solo pinchazo mató al insecto.
El veneno del odio de la araña mató al mosquito.
El aguijón, que le surgió de las entrañas, era fruto de la rabia.
Y así, desde entonces, hay arañas que tienen veneno, y aguijones ocultos preparados para inyectartelo.
Seas quien seas, para muchas arañas no eres mas que una simple mosca, y el odio les hace crear constantemente su veneno.
Ten cuidado.